Como si el Chupacabras “renaciera entre sus cenizas”, nuevos seres están aterrorizando a los ranchos de Texas: se tratan de perros vampiros.
Phylis Canion, propietaria de uno de las granjas afectadas en Cuero, aseguró que en sus tierras se han acumulado decenas de cadáveres, cuyos cuerpos han sido drenados de sangre a través de dos orificios, que aparentemente son mordeduras de colmillos.
Uno de los perros de Drácula, como los están identificando entre la comunidad, fue encontrado muerto y es analizado por científicos para determinar si no se trata de una especie no identificada de perro salvaje.
“He visto todo tipo de animales, pero nada se compara con estas bestias que se alimentan de sangre de animales vivos.
Son verdaderamente horripilantes. Deben ser producto de la mutación de un animal salvaje”, señala el veterinario Travis Schaar, quien examina el ADN del misterioso perro azul.
La apariencia de estos perros vampiros es pequeña, con piel azulada, sin pelo y con dientes extraños, señaló Canion al británico The Sun.
Nadie sabe de donde salieron, lo único cierto es que se han multiplicado rápidamente.
Mientras avanzan los estudios, los pobladores de Cuero ampliarán las medidas de seguridad para proteger los animales y se resguardarán en sus viviendas desde bien temprano para evitar encontrarse cara a cara con el diabólico perro azul.
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